sábado, 25 de diciembre de 2010

Largo de aquí

Bajé del bus y como no entendía ni michi del inglés o italiano, seguí al grupo de gente que bajaba, es decir todos… caminamos por una calle pequeña y luego volteamos… de pronto me quedé maravillada, sin poder moverme y emocionada hasta las lágrimas, mis ojos veían la singular plaza San Pedro. No me lo podía creer, estaba en el Vaticano, empecé a caminar como si estuviera sobre las nubes y mirando alrededor, disfrutando este lugar tan famoso… En el hospedaje me dijeron que debía ir con falda y como ya hacía calor me puse un conjunto que compré para mi graduación en Madrid, el más barato que conseguí. Los que me conocen deben saber que usualmente uso falda y nunca muestro mis hermosos hombros… pero hacía calor y dejé la chaqueta. La cola era inmensa, pero avanzaba, observé que a las mujeres que estaban en short o bermuda no las dejaban entrar al cerco que bordeaba la Iglesia de San Pedro, tampoco entraban los hombres en BBD o short. Cuando yo llegué, el guardián me dijo que no podía entrar, más o menos en su italiano o inglés, no lo se, pero objetaba que yo tenía mi manga cero,… dejé pasar a las personas y no tenía otra arma que insistir, insistir e insistir. Yo le hablaba en español, hasta que me permitió entrar y me dijo algo así que no le importaba si me sacaban. Yo chocha encargué mi bolso en la guardería al costado de la Iglesia y luego entré… Miré las esculturas, bacán, Miguel Angel con “La piedad”, el altar de Bernini, me juntaba a algunos grupos a intentar entender algo… de pronto un italianito bajito y bien al terno me llamó, yo como no entendí, seguí caminando… se acercó me tocó del brazo y me dijo algo, yo lo quedé mirando con mi cara de “Yo no fui, fue Teté” y cambió de idioma, ji,ji,ji me volvió a decir que debía estar con chaqueta, él me hacía mímicas agarrándose su terno, y yo le dije que mi chaqueta se quedó en el hospedaje, ja, ja, ja ya para eso él me estaba gritando y la gente se estaba acercando, entonces escuché su voz con un tono muy fuerte y su brazo derecho me señaló la puerta en un ademán con mucha energía, entendí “Largo de aquí”… agaché mi cabeza y empecé a caminar pero no fui directamente hacia la puerta sino que tomé el otro extremo del templo y seguí tomando fotos, cuando vi que se acercaban 3 de esos tipos tan guapos y bien al terno… salí a un paso ligerito, qué me quedaba… Tres días después volví “más recatadita” y visité los museos del Vaticano.

Todos los caminos conducen a Roma

Respiraba hondo, ya había disfrutado Madrid, París, Berlín y algunas ciudades alemanas… Los días ya se acortaban, pero podía aprovechar todavía un vistazo a otro lugar. Recordaba las palabras de Herminia “Eli, dicen que en Europa todo está cerca, viaja a Roma” y las asesorías que hizo William antes de mi recorrido, informándome sobre las distancias entre ciudad y ciudad... yo lo observaba frente a la pc y él me iba explicando los lugares especiales en cada lugar, recorrimos lugares claves de Europa, me hablaba de algunas costumbres y palabras que no debería utilizar. Todo lo decía con tal seguridad que parecía que él había visitado el viejo mundo, ja,ja,ja. Fui a varias Agencias de turismo, y el pasajito para Roma, entre 400 y 600 euros ya sobrepasaba mi presupuesto. A pesar que buscaba lo más económico, que me quedaba en hospedajes juveniles, y comía fiambres adquiridos en supermercados… ya no podía. Alguien me dijo que podía conseguir ofertas ciertos días a la semana por internet… ¡buena idea! Empecé a navegar y ok Alitalia se metió en mi recorrido, oferta flash por ese día, Barcelona – Roma 126 euros (ida y vuelta)! Era el momento exacto, empecé a hacer la adquisición vía internet. ¡Mi madre!, nunca había hecho una transacción de este tipo, y ¿si era una estafa?, ni modo eso implicaba quinientos nuevos soles, pero ya no había otra posibilidad… Además sólo podía viajar del 11 al 18 de junio… hubiera extendido más el tiempo pero ya no es posible, mi retorno a Perú será el 21 y eso no se puede cambiar, una solución es perder el pasaje, y quedarme en Europa, siendo ilegal y buscarme una chambita, pero ni loca, yo vine para volver… Volvamos a la compra por internet, mis miedos me acompañaron. Hice una maleta pequeña, viajé en bus de Madrid a Barcelona, preparándome mentalmente por si perdía mis últimos euros. Disfruté casi todo el día en Barcelona, tomé el bus del city tours e hice un recorrido por la ciudad y sus puertos mirando el Mediterráneo. Más tarde, en el inmenso aeropuerto, recorrí por largos túneles y muchas rampas… llegué desde donde saldría mi vuelo, la tranquilidad volvió a mi cuando la señorita me alcanzó un documento y observó mi pasaporte, “Bien, vaya a la otra ventanilla a pagar sus impuestos”, yo le insistí “¿Todo está bien?, “Si, el que sigue...” ¡Uf Bien! Mi corazón saltó de emoción… me acerqué a un teléfono llamé a Chiclayo y saludé a mi hermano y le dije “Me voy a Roma” un silencio… mi hermano se quedó callado, como asimilando la noticia y luego atinó a decir “Saluda al Papa”. (2004)

Los hospedajes juveniles

No hay mejor alternativa para hospedarse a precios módicos, tanto en Madrid, París, Roma y en muchos lugares del mundo como en los hospedajes Juveniles. Claro que los jóvenes adultos también tenemos una camita en un ambiente de 2, 3, ó 4 camarotes por un costo que va de 19 a 24 euros. Más barato no "guay" dijo mi mamá.
Podemos comprar algunos alimentos para preparar, hay cocina disponible, vajilla y microondas. Pero se debe dejar limpio el lugar. Algunos tienen un bar, donde puedes llevar tu comida o algo de beber o comprar en esas máquinas y mirar televisión o escuchar música. Los servicios higiénicos, en algunos lugares están separados por pisos, por ejm. En el 2do piso el servicio es de las mujeres y en el 3ero de los varones, pero en otros son para todos. Las duchas tienen puerta y te puedes estar bañando y en el urinario hay un varón….
Tu equipaje debe estar bien acomodadito para no interrumpir a nadie y si llegas en la noche y traes algo para comer, lo haces sin fastidiar a nadie, pero si llegas tarde y los demás duermen tampoco hay que incomodarlos. Me sucedió en Roma, en un hospedaje, que nadie hablaba español, pero las japonesas, americanas y europeas chiquillas todas se pusieron a discutir en inglés, porque unas querían que se apagara la luz y las recién llegadas querían hacer otras cosas. Yo enterrada en mi camita me divertía escuchando a las gringas y chinas.
Sabes, estas niñas tienen un chorro de aprendizaje en su viaje, desde que lo proyectan en sus países, cómo se organizan y financian, los recorridos que las esfuerza en un aprendizaje voraz de la historia, geografía, economía de los países a dónde van… además, como viajan en grupo la riqueza de compartir en equipo, decidir prioridades y tomar decisiones. Van solas y saben cuidarse… si tan sólo pudiéramos promover esos viajes de nuestras estudiantes al interior de nuestro país, pero ellas hiciéndolo todo… desde la planificación hasta la evaluación de un viaje o un recorrido como el de Chiclayo – Cutervo – San Andrés – Santo Tomás – Jaén – Chiclayo, o la ruta de Chiclayo – Chota – Bambamarca – Cajamarca – Chiclayo, o la de Chiclayo - Chachapoyas – Cutervo – Chiclayo. Sería una interesante oportunidad de crecer amando más al Perú, investigando in situ esos recorridos.

Mi día

(Junio, 5, 2004) Era tarde y almorzamos un menú en un lugar cercano, tratando de asimilar lo compartido esta mañana. Le dije “Gracias amiga, estoy viviendo momentos especiales y justo hoy que es mi cumpleaños”. Se sorprendió, se levantó y me abrazó, fue un momento lindo. Ella debía irse al trabajo y yo seguiría recorriendo Berlín… “En la noche nos encontramos en casa” me dijo. Llegué a su casa cerca de las 11 de la noche, luego de un día tan intenso de sensaciones y emociones, mirando los museos que encierran muerte, venganza, odio y mucho dolor… el Museo Judío de Berlín y el Museo Checkpoint Charlie, el primero con los restos de las víctimas de las guerras mundiales y el segundo con la víctimas del Muro de Berlín. Sabes, esto no es lejano, esto sucedió hace poco, hace apenas 70, 60, 40 años y los mayores de hoy sufrieron y sus descendientes también. Mientras el queque se horneaba conversamos de todo, desde los museos hasta de “Frejolito” y Jehude. Jorge cantaba acompañado de su guitarra, y pasó de la despedida del Che al Feliz cumpleaños… con la petición de Mitzi que diera palabras combativas… ja,ja,ja. Ella se vacilaba, de nosotros y la izquierda cada vez más dividida. En Perú empezaría a oscurecer y nosotros de amanecida, comiendo King Kong traído desde Chiclayo por Jorge que estuvo el mes pasado por allá. Gracias chicos, espero nos encontremos también en la ciudad de la Amistad.

BERLIN

(Junio, 2004) Berlín es un chorro de historia que en pequeñas cápsulas nos llegó cruzando el charco. Estar aquí implica mirar el mundo tan nuestro. Embarga la majestuosidad del Reichstag, el actual parlamento alemán. Con una cúpula inmensa en el techo, de tal manera que los visitantes (hay una cola muy larga) subimos en ascensor hasta ese lugar sin poder ingresar al parlamento. Dentro de la cúpula hay una torre de cristales donde uno se mira por pedacitos… así como las fotos en el contorno que nos cuentan la vida de Alemania y del edificio por pedazos. Ascender al Berliner Fernsehturm es interesante, pues es un mirador y nos permite ascender a más de 200 metros y mirar toda la ciudad y frente a ti tienes los croquis con las indicaciones precisas de los lugares turísticos e históricos y al levantar la mirada los tienes al frente. Si subes al restaurant unos metros más arriba podrás tomar algo y mirar la ciudad sentadita porque el restaurant da vuelta y se observa la antigua y nueva ciudad. La Portada de Brandenburger, los templos antiguos y los museos que encierran bellezas. Por cierto los alemanes se han cargado de todo el mundo piezas no sólo esculturas sino arquitectónicas inmensas, como las que están en el Pergamon museum, el altar de Pérgamo, el templo de Babilonia, las reliquias egipcias… felizmente el Señor de Sipán regresó, “vivito y coleando” para buena suerte de los Lambayecanos. Especial atención tiene el Jewish Museum Berlin (Museo Judío de Berlín) con una estructura diferente, las puertas, ventanas, hasta las cerámicas del piso no son simétricas y cuando una camina da la sensación de inestabilidad, pues eso es lo que se va sintiendo al observar las muestras del holocausto. Hay fotos, objetos, cartas, información sobre las víctimas de la guerra… Mitzi me acompañó y ella traducía los escritos… y más historias de vida en angustia y dolor. Nos informaron que podíamos entrar a una habitación que simula las sensaciones que vivían los presos en los campos de concentración. Ingresamos 5 personas (no aceptan más por grupo), nos pidieron silencio, es un ambiente de “cemento”, frio y lúgubre, si miras hacia arriba no puedes saber dónde termina la pared es inmenso pero todo es tenue, hay silencio… A lo lejos se escucha un ruido, es de un carro, se detiene, hay gritos, llantos, bajan, son presos y guardias, dan órdenes, gritos, golpes… de pronto, los carros arrancan y otra vez un silencio profundo…

Los trenes alemanes

(Junio, 2004) Ya es las 10 y empieza a oscurecer aunque todavía las luces públicas están apagadas. Mis ojos disfrutan de un paisaje que vibra y alimenta mi ser: Pequeños bosques y planicies verdes, surcadas por algunas ciudades, y estaciones de tren que conectan con aeropuertos. Ya retorno de Berlín a Düselldorf, decidí tomar el servicio de tren barato ¿Qué significa eso? Les explico, el tren rápido, el bacán, el ICE (Inter City Express) es el más utilizado, corre a 220 Km. x hora, sus cabinas son de 6 asientos, confortables, con un bar super, cabinas con literas, espacios con asientos y mesas y la gente con sus libros y PC. Bueno, esto lo se porque me di el gusto de venir de Düsseldorf a Papenburg y de Leer a Berlín en esos trenes, claro que lo hice porque el amado esposo de Martha pensaba en mi seguridad y confort en el viaje. Dentro de ese tren hay 2 clases y reservados; al subir lo recorrí jalando mi maleta y entré a una zona de mesas con 4 personas, me puse a revisar unas revistas que estaban sobre la mesa, pero disimuladamente miraba todo, en especial una ventanita de una puerta del bar, allí dentro habían licores, copas, mesas altas y música, fíjense todo un bar elegantón. De pronto entró el vigilante o el que chequea los tickets, y ya pueden imaginarlo, me mandó a otro lado, que feo alemán… bueno, sin roche jalé mi maletita y entré a un compartimento con 6 asientos, me acomodé… más tarde entraron 2 personas y pasó otra vez el feo ese. Y ya lo pueden imaginar, me volvió a sacar, y me envió al servicio común. Por mas que una se haga la "sueca", nos podemos entender sin importar el idioma, en especial cuando los alemanes dan órdenes. Con Mitzi descubrí que no hay muchos buses en Alemania, no me quedó otra que tomar el servicio de tren barato que significa ir de tren regional en tren regional. Es decir, lo que el tren rápido hace en 4 horas yo lo haré en, saquen su cuenta... salí de Berlín a las 15:16 horas y llegaré a las 3:45 de la madrugada a Düsseldorf. Así es, 13 horas de viaje, con 6 cambios de trenes, con esperas en estaciones, me la pasaré de tren en tren, de estación en estación, y aunque no tengan las comodidades del tren rápido, tampoco son de mala muerte, no, no son como el tren macho. ¿Si saben cuál es el tren macho? el de Huancayo a Huancavelica, si todavía existe, ojalá lo puedan disfrutar, yo tengo unas anécdotas recorriendo esos lugares... Escribo porque en esta cabina sólo somos tres personas y aunque aquí hay seguridad, también hay temor. Pero cuando pienso que me estoy ahorrando 52 euros me tranquilizo, y creo que tomé una buena decisión.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Lutero, muy cercano.

(Junio, 2004) Barphil tuvo la gentileza de llevarme a conocer muchos lugares. Fuimos con Martha, su nena y su hermano José a recorrer Hamburgo. En esta ciudad, aparte de las muchas cosas que vi, llegamos a la Iglesia de San Michel. Preciosa infraestructura, fue quemada varias veces en las guerras mundiales pero allí está, es una riqueza arquitectónica. En el frontis está San Miguel pisando a la serpiente (el diablo). A un costado hay una escultura gigante de, nada menos del padre del protestantismo Marín Lutero. Interesante, pues claro estamos en la cuna del protestantismo... dentro del templo hay un Museo en honor a Lutero, sus escritos y objetos personales nos hicieron sentir lo que deben haber vivido ellos, los que iniciaron la Reforma. Parecía todo tan cercano, tan nuestro que antes de salir, volvimos al templo y nos acercamos a unos candelabros, y como si sintiéramos lo mismo (Martha, José y yo) tomamos velitas, las prendimos y las colocamos en el conjunto de velas prendidas, hicimos una oración, agradecimos a Dios por esos hombres y mujeres mártires del cristianismo... y porque debemos enseñar eso a los jóvenes. Por supuesto yo en Perú, ellos en Alemania. No se porqué hicimos ese ritual, no es parte de nuestra liturgia pero al parecer la iglesia Luterana si lo hace, total fue una oración comunitaria.